¿Bienvenidas las crisis? ¿Leí bien? ¿Cómo que bienvenidas?
En efecto, eso fue lo que pensé cuando mi amigo Jesús Villaseñor, a quien mucho aprecio y admiro, me dio el manuscrito de su más reciente libro, así intitulado.
Jesús Villaseñor ha trabajado apasionadamente desde hace más de sesenta y ocho años; sus logros personales y profesionales son múltiples y notables, y el tema de las crisis siempre le ha apasionado, así que se dio a la tarea de escribir un libro donde nos comparte reflexiones y consejos para enfrentarlas, y lo ilustra con detalles personales de su vida y una enorme generosidad.
Nos encontramos ante un libro muy interesante. Jesús Villaseñor, brillante economista, es todo un personaje en el mundo financiero; ya a los ochenta y cuatro años, cuando muchos deciden descansar apaciblemente, Jesús, que trabaja desde adolescente (más de sesenta y ocho años de trabajo muy productivo), con el entusiasmo que siempre le caracterizó, se da a la tarea de ordenar sus pensamientos acerca de un tema que conoce muy bien por dentro y por fuera: las crisis.
No se trata de una lista de sus logros (que son muchos y notables); más bien es un recorrido donde, sin temor de mostrar —con humildad— sus errores o malas decisiones, con mucha franqueza nos va ilustrando para que seamos capaces, ante una crisis, no de escondernos o de aguantarnos (como él señala), sino de enfrentarla actuando. Y da ejemplos profesionales: por ejemplo, nos narra un interesantísimo episodio del rescate de un crédito en la Bolivia de los años 70 (gobernada por militares) derivado de la venta de una planta de ácido sulfúrico en el altiplano, con mala actitud por parte de ese Gobierno y en una época de muy difíciles
comunicaciones, es decir con muchísimas dificultades, pero que logró resolver muy exitosamente.
Incluye también episodios familiares donde los protagonistas son su esposa y sus cuatro hijos. Inclusive nos narra un periodo especialmente difícil, (una verdadera crisis) en la relación con su esposa (a los cuarenta y nueve años de casados) y cómo, con una estrategia bien planteada y llevada a cabo, estableciendo muy claramente sus prioridades, lo resolvió. Ahora se ven con frecuencia separaciones de matrimonios, ya con muchos años de casados, así que anima ver cómo Jesús enfrentaba esta crisis, con aplomo, con buena actitud, con valentía, diseñando muy bien —con cuidado, atención y claras prioridades— una estrategia exitosa. Una experiencia muy interesane que ilumina y da esperanza y, por supuesto, se agradece la decisión de compartirla
para el beneficio de sus lectores.
Del Prólogo al libro: BIENVENIDAS LAS CRISIS, escrito por Carlos Ruiz González, Profesor decano del área de Política de Empresa (Estrategia y Dirección) en el IPADE, columnista en El Financiero, comentarista sobre dirección, consejero empresarial.
